Desde la discoteca bajo las estrellas convocada por Dënver al carnaval popular de Sol y Lluvia. Desde la distorsión lisérgica de The Ganjas hasta el coreado repertorio de Ases Falsos. La penúltima jornada del festival Rockodromo 2015 congregó una panorámica de la música popular chilena. Una que es capaz, también, de sostener una fiesta por más de siete horas frente a un público tan respetuoso como efusivo.
Durante el momento de mayor asistencia, la Plaza Sotomayor recibió a cinco mil personas. Cerca de 12 mil circularon frente al escenario.
Este domingo se dará paso a la clausura del certamen, que ya se extiende hasta su quinto día. El cierre queda a cargo de Weichafe, Sinergia y Jimmy Fernández, entre otros.El certamen celebró durante este sábado el primer encuentro con su escenario central. De manera inédita en sus 11 años de vida, Rockodromo se posó sobre la Plaza Sotomayor de Valparaíso, con un arranque puntual a las 17.00 horas a cargo de Los Choros del Canasto, de Linares. Los cinco días del evento son organizados por las Escuelas de Rock, un programa del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes, con el apoyo de la iniciativa Verano para Todos y Todas.
Tras el inicio, Doctor Vena, Juanjo Montecinos, Embajadores de la Isla, los argentinos Usted Señálemelo, The Ganjas, Adelaida, Kimeros, Andrés Godoy, Dënver, Ases Falsos y Sol y Lluvia pasaron por la tarima, mientras que frente a ellos, circularon cerca de 12 mil asistentes durante todo el día. En el momento de mayor capacidad –durante el show final de Sol y Lluvia– el público alcanzó un máximo de cinco mil personas: el tope del perímetro demarcado.
“Vinimos sintiendo este abrazo de pueblo hace muchos años. Pero estar en Rockodromo es una oportunidad grande de encontrarnos en la calle y perder el medio a juntarnos en grandes cantidades”, comentó al finalizar su concierto el cantante y fundador de Sol y Lluvia, Amaro Labra.
Regreso a las calles