Tras tres días sin regata, producto del frente de mal tiempo que azotó Puerto Toro, la competencia Regata Desafío Cabo de Hornos, que se efectúa por segunda vez, retomara las actividades mañana jueves con la idea de llegar a Cabo de Hornos.

Las condiciones en estos días han sido muy difíciles y la flota ha debido permanecer en el pueblo más austral del mundo (viven 22 personas), hasta el hoy (miércoles). Y mañana (jueves) se ve una pequeña ventana y la flota seguirá navegando al sector más austral, con el objetivo de llegar a Cabo de Hornos.

“Han sido días muy difíciles y las condiciones para navegar son muy adversas (fuertes vientos de más de 30 nudos), pero permiten algunas ventanas muy pequeñas y esperamos que estas nos permitan que podamos bajar y llegar a última hora a Hornos y luego rápidamente escondernos en Caleta Martial y poder volver el sábado a Puerto Williams”, señala Ricardo Ramírez, capitán del Patagonia.

El también campeón vigente del Desafío Cabo de Hornos manifiesta que “solamente el primer día pudimos correr. Fue una jornada muy entretenida que se disputó con muchos chubascos y algo de granizo y con rachas de viento de hasta 35 nudos”.

Sobre la competencia Ramírez sentencia que “tener 14 yates es un éxito. Logramos el doble que el año pasado y logramos el objetivo de unir a muchos países que quieren llegar al Everest de la navegación como es Hornos. Esperamos que esta regata se repita todos los años”.

Antes de hacer los preparativos para zarpar (mañana en la madrugada), los capitanes y tripulantes de los yates junto a la dotación del buque de la Armada "PSG Isaza" efectuaron una limpieza de playa en Puerto Toro.