“Espero ser recordado como una buena persona”, fueron las palabras de Sergio Zamora, el funcionario público más antiguo del Servicio de Salud Valparaíso-San Antonio, al dejar la institución, tras 55 años de trabajo ininterrumpido.
Sergio Zamora ingresó a la institución pública en 1960. Sus primeros días fueron en el Hospital Psiquiátrico del Salvador, lugar en el que durante ocho años fue Auxiliar de Enfermería, tras realizar un curso proporcionado por la misma institución. Luego siguió su camino en el Hospital Eduardo Pereira —llamado en ese momento Hospital de Valparaíso— centro asistencial en el que trabajó en diversos servicios hospitalarios, llegando incluso a trabajar en la morgue de ese lugar.
Finalmente en 1982, llegó a la portería de la Dirección del Servicio de Salud Valparaíso-San Antonio, lugar en el que vio pasar numerosas generaciones de funcionarios y funcionarias, quienes siempre tuvieron palabras amables para referirse a su dedicado trabajo que comenzaba de día y continuaba de noche. Precisamente en esas noches de vigilancia, Sergio Zamora no estuvo nunca tan solo. Contó que ciertas presencias paranormales se dejaban sentir, escuchar y ver incluso objetos que caían sin intervención en algunos pasillos del edificio.
Dejando las experiencias paranormales de lado, el funcionario con más años en el servicio, mostró su lado más lúdico, mágico y cercano a los niños y niñas: Encarnó el personaje navideño de Viejito Pascuero durante 15 años, repartiendo regalos para los hijos e hijas de los funcionarias y funcionarios. Los pequeños y pequeñas, además de recibir sus regalos, le hacían entregas de cartas —las que menciona— quiere llevarse hasta el último de sus días con él, al igual que el traje rojo del personaje favorito de los niños y niñas en Navidad.
El portero más antiguo del SSVSA, dijo sentirse feliz de haberse formado en el servicio público. Y emocionado por el cariño recibido. Extrañará a sus compañeros, extrañará el edificio, pero es hora de dedicarse a descansar, luego de todo el trabajo realizado.
Y una de esas tareas pendientes, es continuar y dedicar más tiempo a su deporte favorito: el golf. Desde los 12 años que es cercano a esta disciplina deportiva, ya que su padre era administrador de un Club de Golf. Comenzó siendo Caddy, para luego aprender de los mismos jugadores y dedicarse de lleno. Y en esos días de golf y aprendizaje, mientras un adolescente Sergio Zamora miraba el juego siendo caddy, el ex presidente de Chile, Arturo Frei Montalva lo invitó a jugar con él en el Club de Golf de Recreo. Años más tarde, estaría jugando en el Abierto Internacional de Golf del Club de Campo de Granadilla, con el cantante y actor chileno Antonio Prieto.
Jugando Golf lo pasa bien, se relaja y fue una recomendación médica de su doctora personal para no dar espacio al dañino sedentarismo.
Don Sergio se despide contento, emocionado y —según él mismo dice, “con sentimientos encontrados”— descansará y dejará su vida de funcionario público, pero nunca dejará de ser la buena persona que todos conocimos, y que él, quiere que recuerden.