La autoridad explicó que, a pesar de que el índice de agua caída es alentador para el sector, reconoce que algunos cultivos en particular podrían verse afectados. Profesionales de Indap de todas las provincias se encuentran desplegados en terreno para verificar posibles daños.
Un exhaustivo análisis sobre los posibles efectos que las últimas precipitaciones podrían haber ocasionado en el sector agrícola regional, se encuentra realizando el Seremi de Agricultura, Ricardo Astorga, quien preliminarmente explicó que, a pesar de que se podrían generar algunos efectos negativos en algunos cultivos, situación que se estaría verificando con equipos desplegados en terreno, “estas lluvias eran muy esperadas, puesto que los agricultores ya estaban manifestando su preocupación debido a la disminución de las aguas superficiales y estábamos coordinando acciones a seguir”, dijo.
Añadió que “eventos climáticos de esta magnitud siempre tienen un lado bueno y un lado malo, claramente habíamos perdido la costumbre de que lloviera en esta cantidad en el mes de abril. Hay reportes que nos indican que hace más 30 años que no se producía un evento de este tipo, por tanto estamos muy por sobre lo que se esperada para el mes”.
En relación a los pro y contra de estas lluvias, aclaró que “nosotros acá en la región habíamos comenzado a tener algunos inconvenientes puntuales. Entonces nos vino muy bien, pero atentos a los posibles problemas, y que estarían relacionados con la producción uva de mesa tardía que estaba por cosecharse y algunas hortalizas”.
Astorga comentó que ha sostenido dialogo con agricultores de toda la región y están muy contentos con las precipitaciones del fin de semana. “En el área agrícola particularmente, nosotros claramente tenemos una ganancia neta a favor con el tema de agua, y podemos mirar con mejores perspectivas lo que viene, de hecho en la parte alta de la provincia de Petorca, precipitó, entre 30-35 milímetros, lo que es muy bueno…”.
La autoridad del agro concluyó señalando que es importante el manejo de información climática y técnica para enfrentar este tipo de eventos, puesto que de esa manera se genera, en lo inmediato, una orientación sobre cómo reaccionar, y a futuro, en relación a considerar la incorporación de cultivos alternativos que se puedan adaptar a las condiciones climáticas actuales.