Desde el jueves pasado que los vecinos de este sector comenzaron a diseñar sus viviendas en conjunto con profesionales del SERVIU y de universidades de la región. Iniciativa que se enmarca en el Plan Integral de Reconstrucción y que apunta a las 47 familias que optaron por la modalidad de Auto Construcción Asistida (ACA), que consiste en construir en el terreno propio.

Tal es el caso de la señora María Moreno, quien vivía con su hija antes del siniestro, pero que ahora es parte de estos talleres que definirán su vivienda definitiva. “Yo creo que sí, va a salir todo adelante, va a ser todo fácil para construir nuestra casa”, manifestó.

Ánimo similar en don José Curipán, quien reside en el sector desde los años 60, y que hoy asistió a su primera jornada. “Yo creo que esto va a dar resultado porque hay deseo de hacerlo. Yo ya planteé adentro que no vamos a tener la casa que teníamos. Imposible, pero sí adaptémonos a lo que podamos hacer”, afirmó el vecino beneficiado.

La metodología de codiseño de estas viviendas, consiste entregar un juego de fichas espaciales que representan los interiores de las propiedades, lo que permite elegir y priorizar lo que estimen conveniente según sus necesidades como familia. En primera instancia, el codiseño consistirá en un dialogo especializado entre las familia y los arquitectos asesores, lo que se materializará en una propuesta de anteproyecto. En tanto, posterior a esto, los profesionales desarrollarán los anteproyectos a nivel técnico-profesional-normativo, para terminar con una exposición comunitaria para que las familias puedan realizar sus últimas observaciones.

En tanto, el Director Regional del Servicio de Vivienda y Urbanización, detalló que “estos proyectos son participativos, de manera que generan una resiliencia en las familias para poder salir de un proceso traumático en estos talles, en los cuáles ellos van a ir definiendo cómo serán sus futuras viviendas. Estos proyectos cumplirán con toda la normativa vigente”.

“Lo que hay son fichas referenciales de metrajes cuadrados normativos. Son modelos referenciales. Pero la familia es quien, en un esquema relacional, decide. No hay modelo tipo, y esa es la gracia de ACA. El modelo tipo nace de la genética familiar”, complementó Lautaro Ojeda, arquitecto y doctor en Ordenamiento Territorial y Urbanismo de la Universidad de Valparaíso.

Por último, cabe recordar que, a comienzo de febrero, se hizo entrega de 10 tarjetas de Bancos de Materiales de 50 UF cada una. Esto, para sólo quienes resultaron con daños de carácter leve en sus viviendas emplazadas en la zona consolidada, por lo que podrán adquirir materiales de construcción que permita reparar sus propiedades.