Un nuevo peak de dióxido de azufre ocurrido en la bahía de Quintero el pasado 10 de abril motivó a la diputada Andrea Molina a exigir, una vez más, que las autoridades se hagan cargo de la contaminación que reina en esta zona de sacrificio y que tanto daño provoca a las comunidades.

“Este nuevo peak de dióxido de azufre ocurrido en Quintero fue de 2100 microgramos por metro cúbico, es decir, superó por 4 veces el límite recomendado por el Servicio de Salud. Mientras todo esto ocurre, el actual gobierno sigue haciendo la vista gorda y prometiendo una norma se SO2 que recién se va a implementar el año 2020 y a fiscalizar el 2023. Son años de espera en los que nuestros niños, adultos y abuelos se seguirán enfermando”, señaló de manera enfática la parlamentaria.

Además, cuestionó la falta de iniciativa estatal a fin de informar a las comunidades sobre la situación de contaminación actual de la zona, en comparación a iniciativas de privados como la reciente aplicación telefónica nixAir, que alerta de manera gratuita respecto a la calidad del aire y entrega datos respecto a qué medidas tomar ante ésta. “Es inaceptable que el mundo privado se esté moviendo con iniciativas para que la ciudadanía se mantenga informada respecto a la contaminación que tiene el aire que respiran y que el gobierno siga de brazos cruzados. Esta aplicación, que opera en Santiago y en zonas del sur de Chile, es lo que nos hace falta aquí en esta zona saturada”.

“Pedimos reunión con el ministerio de Medio Ambiente para que se estudie la posibilidad de que se aplique esta iniciativa en nuestra zona. La gente tiene derecho a saber qué esta respirando y, ante eso, decidir si sus niños pueden realizar deporte o si deben recurrir al servicio de salud, entre otras medidas”, detalló.

Finalmente, la parlamentaria concluyó que, “exigimos la pronta y correcta aplicación del plan de descontaminación, de la norma de dióxido de azufre y de la norma de arsénico. Seguiremos presionando para que la actual administración haga su trabajo como corresponde y aplique las políticas públicas que la gente necesita para resguardar su salud”.

Cabe recordar que, tanto en Quintero como en Puchuncaví, se han detectado niveles altos de contaminación. El pasado 5 de abril en la localidad de Los Maitenes, se registró un peak de 1600 microgramos por metro cúbico de SO2.