Caras de alegría y mucho interés se logran distinguir en los niños y niñas del jardín infantil “Caritas Risueñas” ubicado en el centro de Limache, es allí donde párvulos conocen a través de todos sus sentidos el medioambiente y lo esencial de su cuidado, aprovechando las grandes áreas verdes y el espacioso patio del recinto educativo parvulario.

A través de este tipo de actividades los equipos educativos propician en los niños y niñas la toma de conciencia sobre el respeto de su entorno.

Además de contar con una compostera en el patio y trabajar en la lombricultura, los párvulos limachinos destacan por poseer en cada sala un huerto medicinal, en donde ellos como protagonistas de los aprendizajes son los encargados de cultivar y darle el cuidado necesario a las beneficiosas plantas, otorgándole también un sentido de pertenencia cultural a labores realizadas por los niños y niñas.

Por otra parte, el jardín “Caritas Risueñas” se destaca también por generar espacios educativos comunes que permiten a niños y niñas de los distintos niveles moverse de acuerdo a su interés en los aprendizajes, favoreciendo la transición educativa de los párvulos.

Verónica Cruz, directora del jardín de la JUNJI cuenta que a través de los aportes de las familias el huerto ha logrado un sello especial, “cada cierto tiempo vamos renovando y reponiendo materiales, lo que nos permite tener una huerta con plantas medicinales, generando pertenencia a los niños y niñas que ven cómo generaciones previas ocupaban métodos alternativos a la hora de buscar cura a ciertos padecimientos”, indicó.