Las altas temperaturas se han dejado sentir estas últimas semanas, convirtiéndose en un incómodo invitado durante la noche. La comida pesada, el aire acondicionado, las telas de la ropa que usamos, e incluso, el tipo de ducha que aplicamos, son factores que inciden en el buen dormir sobre todo cuándo el día es muy caluroso y en las noches la disminución de la temperatura es leve.
El director médico y neurólogo de Clínica Somno, Pablo Guzmán, explica que la temperatura ideal para dormir de noche es entre los 18º y 20º. “El exceso de calor puede provocar molestias como sudoración, picazón en la piel y sofoco, para lo cual hay cambios de rutina y pautas para aplicar en el dormitorio que pueden ayudarnos a mejorar el sueño nocturno”, detalla.
¿Cómo dormir con esta sensación térmica? Desde Clínica Somno entregan algunos consejos para enfrentar las olas de calor durante la noche y recomiendan cuidar el sueño profundo para no distraer al cuerpo:
- Hidratación: Con más calor, más agua se toma y más se va al baño. Por esto, se recomienda hidratar el cuerpo por última vez dos horas antes de dormir y así evitar esta situación.
- Comidas: Es recomendable optar por una cena ligera y evitar la ingesta de alcohol, ya que inducen un sueño menos profundo, el que se verá incrementado con el calor.
- Ducha: Si el calor es excesivo, se recomienda una ducha tibia y no fría. Esto porque el cuerpo asimila la temperatura templada a un buen descanso, y el cambio de temperatura al salir del baño es un excelente inductor natural del sueño.
- Ropa liviana: Utilizar telas livianas como el algodón. No es aconsejable dormir completamente destapado, porque en la madrugada la temperatura ambiente y corporal bajan y puede dar frío, lo que saca a la persona del sueño profundo.
- Aire Acondicionado: Si se se utiliza, manténgalo a una temperatura cercana a los 22 grados ya que el frío puede producir problemas como sequedad de mucosas, alergia y tos.