Los últimos días de mayo serán recordados como los más fríos para dicho mes en décadas. El martes 31 los termómetros cayeron a -2,1ºC en la estación de monitoreo de Quinta Normal, la mínima más baja desde 1967, dejando atrás los -1,6ºC de 1993. En Buin, en tanto, el frío llegó a -5,3ºC. En el Sur, la comuna de Los Ángeles marcó -7,2°C.

La tarea, ahora, es prepararse para un duro junio y contar con la calefacción más apropiada para cada hogar. La preocupación no sólo debe abarcar la arista económica, sino también sanitaria.

“Al tener un calefactor debemos preocuparnos de no produzca contaminación intradomiciliaria. Por ejemplo, hay gente que utiliza salamandra o braseros, los que desprenden monoxido de carbón. Cada año se reportan intoxicaciones por este elemento, lo que incluso puede ser mortal”, comenta José Miguel Arriaza, director de la Escuela de Energía y Sustentabilidad de la U. San Sebastián.

¿Qué factores considerar al calefaccionar la casa?

“Debemos considerar además el tamaño del lugar que queremos calefaccionar, de lo contrario hay un gasto energético extra y no se cumple el objetivo de mantener el calor en una zona (…) Al comprar una estufa debemos considerar también la materialidad de la vivienda, la orientación de la misma, saber los horarios en que recibe el sol, entre otros (…) Casas o departamentos con orientación Norte reciben más sol y calor natural durante el día, contrario a lo que ocurre con los que miran al Sur”, explica Arriaza.

Revisar la vivienda

A juicio del académico, es importante chequear el estado en que se encuentra la casa a calefaccionar.

“Muchas viviendas tienen aislación térmica deficiente, dejando escapar el calor por la ventana, las puertas, el techo, los muros. Es fundamental revisar estos puntos para evitar fugas”.

¿Estufa eléctrica, a gas o parafina?

“Todo depende de los requerimientos de cada familia”, comenta el docente. “Generalmente las estufas a parafina son más económicas que las eléctricas, pero las eléctricas tienen la ventaja de ser mucho más limpias. Una estufa eléctrica no produce contaminación intradomiciliaria, lo que sería ventajoso en hogares donde hay niños y/o adultos mayores. A mi juicio, desde el punto de vista de la calor limpio que entrega, primero optaría por eléctrica, luego por gas y finalmente por parafina.

Pero ojo, “podemos encontrar estufas eléctricas baratas, pero que no son eficientes. Algunas que se venden a 10 mil o 15 mil pesos gastan mucha electricidad, y si permanecen varias horas prendidas, es probable que eleven la cuenta de la luz. La idea es informarse del nivel de consumo del producto y compatibilizar gasto y eficiencia”.